👶 Receta de tarta de mousse de yogur sin hornear y gelatina de bayas | cómo

En este fresco postre, las frutas más coloridas de la temporada se complementan con un rápido glaseado de balsámico y pimienta negra. Habrá que colar el yogur y enfriar la mousse durante unas horas, pero las bayas con balsámico se pueden hacer justo antes de servir. El glaseado se licuará si se hace con antelación.
380 calorías (kcal)
190 calorías de grasa
21 g de grasa
13 g de grasa saturada
1 g de grasa poliinsaturada
6 g de grasa monoinsaturada
Colesterol en miligramos (mg): 80
160 miligramos de sodio
46 g de hidratos de carbono
3 g de fibra
42 g de azúcar
6 g de proteínas
Coloque un colador sobre un cuenco y fórrelo con dos capas de estopilla húmeda o toallas de papel, dejando unos centímetros de saliente en ambos lados. Cubrir con la tela de queso u otra toalla de papel y refrigerar durante 3 o 4 horas, o hasta que esté espeso, cremoso y reducido a la mitad.
Combinar la miel, 2 cucharadas de agua y 1/8 de cucharadita de sal en una sartén pequeña. Rompa la vaina de vainilla a lo largo con la punta de un cuchillo de pelar y raspe las semillas en la sartén. Incluya también la vaina. A fuego medio, llevar a ebullición, removiendo continuamente hasta que la miel se haya derretido. Retirar del fuego tras un minuto de ebullición intensa, dando vueltas a la sartén. Dejar 15 minutos para que se enfríe a temperatura ambiente. Eliminar la vaina de vainilla de la receta.

🥳 Receta de tarta de mousse de chocolate y yogur con pistachos

Engrasar y forrar un molde de 23 cm con papel de hornear en el fondo y los lados. Para hacer la base, en un procesador de alimentos, triturar los dátiles, la avena, las nueces y el cacao en polvo hasta que estén finamente molidos y empiecen a pegarse, unos 2-3 minutos. Asegúrese de que la mezcla se dispersa de manera uniforme y se presiona firmemente en la base del molde.
Mientras tanto, bata la nata líquida hasta que se formen picos firmes en un bol grande con una batidora eléctrica de mano o una batidora de pie equipada con un accesorio para batir. En una taza aparte, bata la leche, el glaseado y la gelatina, y luego incorpórelos suavemente a la nata hasta que estén completamente mezclados. Repartir uniformemente la mousse sobre la capa base. Refrigere durante 2 horas después de cubrirla.
Poner el chocolate y la nata en un pequeño bol resistente al calor sobre un cazo con agua a fuego lento para hacer la ganache de chocolate. Calentar hasta que el chocolate esté completamente derretido y, a continuación, añadir la leche. Dejar enfriar durante 5 minutos antes de verterlo sobre la mousse. Refrigerar durante 4 horas o toda la noche después de espolvorear los pistachos por encima. Saque el pastel del molde y córtelo en rebanadas para servirlo.

🐹 Mousse de miel y yogur griego: segunda parte

Enlace al menú principal. Ir al contenido principal, haga clic aquí. Ir a la barra lateral principal Ir al final de la lista. Imprimir receta Saltar a la receta El postre ideal para el verano es esta tarta de mousse de yogur griego, sirope de tomillo y chocolate blanco sin culpa, con una base de nueces y avena y frutas frescas por encima.
Con mucha fruta fresca y un ligero chorrito de azúcar extra, esta tarta de mousse de yogur griego, miel y chocolate blanco está servida. Como la mitad de la nata de la mousse se sustituye por yogur griego (2 por ciento de grasa), que no sólo aporta frescura sino también proteínas, es un postre ligero y veraniego con un mínimo de culpa. La dulzura de la miel y el chocolate blanco equilibra la acidez del yogur, lo que da como resultado una mousse que sabe como un cruce entre una aterciopelada tarta de queso y un suave helado de vainilla. Y, aunque no es tan baja en grasas como esta pannacotta de yogur con salsa de fresas, creo que no te arrepentirás de comerla, sobre todo si llevas una dieta equilibrada. Esta tarta tampoco tiene gluten, debido a la avena y las nueces que componen la base.

👋 Mini tarta de mousse de arándanos y yogur keto

En una batidora, haz un puré con las fresas y el zumo de limón hasta que esté suave. En un cazo, calentar suavemente el puré y el azúcar hasta que el azúcar se disuelva. Apagar el sol. Saque las hojas de gelatina remojadas del agua y aplíquelas a la mezcla de fresas. Remover hasta que se disuelva por completo y dejar enfriar.
Batir el yogur hasta que se haya enfriado. Incorporar la nata a la mezcla de fresas hasta que se haya espesado. Vierta la mezcla sobre la base de galletas y refrigere durante 6 horas o toda la noche hasta que cuaje. Servir con fresas y una porción de yogur griego.