😐 Ideas para belenes caseros

En Navidad, los checos necesitan casi todas las piezas de la carpa y nada se desperdicia. Poner una o dos escamas de carpa en el bolsillo es tradicional, ya que se supone que garantiza que el dinero seguirá estando en él durante el año. Aunque no se la comen, algunas familias compran una carpa, la guardan en la bañera durante unos días como una mascota navideña y luego la sueltan en un río o estanque cercano.
La estatua del Niño de Praga en la Iglesia de Nuestra Señora Triunfante del Barrio Pequeño es otro signo de la Navidad checa. En ocasiones especiales se viste con ropajes reales de piel de armiño; por lo demás, sus ropajes cambian con las estaciones y, por supuesto, tiene uno especial para la Navidad. Cada año, visitantes de todo el mundo acuden a ver al Niño de Praga, incluidas muchas personalidades. Se rumorea que el escritor francés Antoine de Saint-Exupéry se inspiró en él para escribir El Principito, y hay quien ha rezado por el éxito y la gloria, uno de los cuales es el famoso escritor brasileño Paulo Coelho, a quien le gusta recordarlo. ¿Por qué no lo ve usted mismo? Tal vez le sirva de inspiración navideña.

🙏 Cómo hacer el belén

El belén es una tradición antigua y eterna, especialmente en nuestro país, pero en todos los países católicos en general. Se trata de una representación en Belén del nacimiento de Jesucristo ambientada en Navidad. El escenario incluye la cabaña, el pesebre donde se coloca la estatua del Niño Jesús entre el 24 y el 25 de diciembre, María, José, el buey y el burro, los pastores de la adoración y, más tarde, los Reyes Magos.
Este escenario se llenó con muchos más y diferentes personajes a lo largo del tiempo, tomados de la tradición evangélica (fueron sobre todo Mateo y Lucas quienes nos mostraron la Natividad y la infancia de Jesús en sus Evangelios), y del folclore y la cultura popular de los distintos lugares donde se realizó la Natividad.
Durante la época navideña, todavía hoy se considera un acto de devoción muy común cuando se pueden admirar maravillosos belenes en iglesias y lugares públicos, pero muchas familias aún conservan la costumbre de montar el nacimiento de Jesús en sus casas, utilizando estatuas y accesorios transmitidos de generación en generación.

😺 Haz tu propio belén

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Montar un belén es una tradición de la Navidad que encanta a los niños: sin belenes (pessebre en catalán o belén en castellano) la Navidad no será Navidad. Las familias lo montan unas semanas antes de la Navidad, y todo el proceso de montaje mantendrá a los niños ocupados durante al menos una tarde entera (incluso un día, si los llevas primero al mercado navideño). En el post de hoy aprenderás a montar el tuyo.
Visita un mercado navideño local (los dos mejores de Barcelona están frente a la Catedral Vieja y frente a la iglesia de la Sagrada Familia). Compra allí un establo en miniatura, figuritas del niño Jesús, María, José, la mula y el toro, un ángel para colgar en lo alto de tu establo, una estrella, los Reyes Magos y sus pajes, y tantos pastores y otras cosas decorativas como quieras. Y no te olvides de un “Caganer” (el popular “hombre de la caca” que esconderemos en algún lugar) para un conjunto de belén perfectamente catalán. ¿No tienes un mercado navideño cerca? Los de HolyArt son mis belenistas favoritos (y puedes conseguirlos en Amazon, como hice yo cuando mi hijo de 4 años coló nuestra Virgen para enseñársela a sus compañeros y se perdió, claro…).

💖 Cómo hacer un belén de madera

A lo largo de la mañana, en la pequeña iglesia de madera se fue formando un belén verdaderamente amazónico. Para cuando terminé de desayunar, un marco de madera estaba a la derecha del santuario, recubierto de plástico azul. Varias personas cortaron y doblaron cartones para hacer casas mientras una brigada de cubos acarreaba agua para llenarlos. Otros trajeron una pequeña palmera para la sombra de las casas y algunos plantones de árboles frutales y forraron la piscina con vegetación.
En el exterior, un hombre tallaba con delicadeza un remo en miniatura empuñando un gran machete, mientras otros ataban partes de un tronco de palmera con lianas para crear una pequeña balsa. María y José estaban a flote en la balsa cuando se completó la escena, remando a punto, mirando con ternura al niño Jesús que dormía en una cama hecha con una gran hoja curvada.
Según los feligreses que lo montaban, el belén variaba de año en año, me dijeron, pero siempre representaba la vida a lo largo del río, tan lejos de la capital urbana de Lima, donde vivo.
A principios de esta semana, cuando recibí las imágenes del insólito belén del padre agustino español, me vino a la mente esa escena y el modo en que reflejaba la vida cotidiana. El padre Miguel Fuertes, que sirvió durante décadas a lo largo de los ríos de la Amazonia y ha sido administrador del Vicariato de Iquitos, que incluye Santa Rita de Castilla, desde la muerte del obispo hace un año.