🐺 Terapia de integración sensorial para adultos

El tacto, el movimiento, la conciencia corporal, la vista, el sonido, el olor, el gusto y la atracción de la gravedad son experiencias sensoriales. La función del cerebro se llama Integración Sensorial, que organiza e interpreta esta información. Para el aprendizaje y el comportamiento posteriores y más complejos, la Integración Sensorial (IS) proporciona una base vital.
Para la mayoría de los bebés, en el curso de los acontecimientos ordinarios de la infancia, la integración sensorial crece. Un resultado normal de esta fase es la capacidad de planificación motora, así como la capacidad de responder a los estímulos entrantes. Pero la integración sensorial no crece tan eficazmente como en algunos niños. Hay una serie de problemas de aprendizaje, desarrollo y comportamiento que se ponen de manifiesto cuando este proceso está desordenado.
No todos los niños con dificultades de aprendizaje, desarrollo o comportamiento tienen problemas de procesamiento sensorial subyacentes. Sin embargo, hay algunos indicios que pueden indicar a los padres que pueden existir ciertos problemas. Entre ellos se encuentran:
Esto puede manifestarse en comportamientos como la irritabilidad o el retraimiento cuando se le toca, la evitación de ciertas texturas de ropa o alimentos, la distracción, las reacciones de miedo ante ciertas actividades ordinarias de movimiento (balanceo, giros).

🥳 Terapia de integración sensorial en el hogar

Entre las bases de datos en las que se buscó se encuentran Medline, PsycINFO, CINAHL, OTseeker y la Base de Datos de Revisiones Sistemáticas Cochrane. La búsqueda se limitó a estudios de resultados informados en revistas revisadas por pares en inglés entre 2008 y 2013.
Los estudios incluidos incluyen pruebas claras de que la estimulación sensorial multimodal aumenta la excitación y mejora los resultados de salud después de una LCT para los individuos en coma o en estado vegetativo persistente. También se proporcionaron pruebas moderadas para la estimulación auditiva, pruebas mínimas para los estímulos complejos y pruebas inadecuadas para la estimulación del nervio mediano.
La tolerancia del cliente y las preferencias premórbidas deben ajustarse a los tratamientos. Antes de que sea posible una actividad más compleja, la estimulación bimodal o multimodal debe comenzar pronto, ser regular y mantenerse.

😻 Terapia ocupacional de modulación sensorial

Los problemas de procesamiento sensorial (que algunas personas pueden denominar “trastorno de integración sensorial”) consisten en exponerlos de forma estandarizada y repetitiva a estímulos sensoriales. La idea que subyace es que el cerebro puede cambiar con el tiempo y permitir a los niños procesar y responder a los estímulos de forma más eficaz.
Asesor de trabajo (OT). Mediante una revisión exhaustiva, el OT decide si su hijo puede beneficiarse de la terapia SI. En la terapia convencional de IS, mediante ejercicios repetidos, el OT introduce al niño en los estímulos sensoriales.
Como parte de una terapia de “dieta sensorial” más rigurosa, muchos OT utilizan ahora esta forma de exposición. Esto implica no sólo cosas como la terapia de equilibrio, la terapia de movimiento y la exposición estructurada a la retroalimentación sensorial, sino también ejercicios y actividades físicas específicamente planificadas y personalizadas.
En una dieta sensorial, el programa de actividades se ajusta a las necesidades exactas y al horario de tu bebé. Bajo tu dirección, pueden realizarse en las sesiones de asesoramiento y en casa. Infórmese sobre si participa en la terapia de IS

🌕 Actividades de integración sensorial para adultos

Por lo general, esto ocurre en los años de la infancia. Usted observa que parece que su hijo pequeño es inusualmente sensible a los ruidos o a la luz. Y con respecto a la ropa y los zapatos, que siempre son “demasiado rasposos” o “demasiado apretados”, es muy, muy quisquilloso.
Luego, un profesor observa que su hijo es un poco torpe en comparación con otros niños de su edad. Tiene problemas con la motricidad fina, como el manejo de un lápiz. Y, sin una causa clara para ti, puede ser propenso a las rabietas o a las crisis.
Procesar los datos sensoriales que recoge del mundo que le rodea. Ser demasiado sensible a los estímulos puede hacer que se ponga nervioso, se angustie, se distraiga o se agobie, o que no sea lo suficientemente sensible. Por suerte, tú harás que se sienta mejor y evitarás las crisis.
No estáis solos, tú y tu hijo. Un estudio de 2009 muestra que 1 de cada 6 niños tiene trastornos sensoriales que interfieren en su funcionamiento diario y en su aprendizaje. Aunque las dificultades de procesamiento sensorial se observan con frecuencia en los niños con autismo, también las padecen muchos niños que no pertenecen al espectro autista.