El microcemento es un material particular, es moderno, basado en cemento, resinas y pigmentos de origen mineral; pero a su vez, es artesanal, puesto que su aplicación se realiza por profesionales expertos, dando lugar a suelos que pueden ser únicos, ya que cada suelo colocado, incluso bajo las mismas condiciones, tomará una belleza distinta y original.

Y desde luego, la originalidad es una de las ventajas del microcemento, puesto que no solo se pueden crear superficies únicas debido a la instalación manual de estos suelos, sino también gracias a la variedad de acabados -mate, brillante-, colores y hasta texturas. Aunque lo más común es aprovechar sus partículas tan pequeñas y densas para hacer superficies totalmente lisas y sin ningún tipo de juntas.

Aparte de eso, claro está, el microcemento se ha posicionado en el mercado, no ya en empresas, sino también para el usuario particular, por diferentes ventajas.

Calidad y durabilidad

Siempre es recomendable acudir a profesionales, como Luxury Concrete, tanto para la búsqueda de productos de microcemento de calidad, para su instalación -algunas personas se animan a hacerlo por cuenta propia-, o para la búsqueda también de profesionales que procedan a adecuar el suelo con este revestimiento.

Siempre valdrá la pena afrontar los gastos, ya que se trata de un material que tiene una calidad muy elevada y una durabilidad aún más destacable, ya que al carecer de juntas -se instala y su acabado es el de una sola pieza-, tener buena densidad y poder luego reforzarlo en su superficie para protegerlo aún más, puede durar sin apenas mantenimiento durante décadas, amortizando toda inversión que se realice.

Posibilidades

El microcemento no solo es utilizado en salones, sino en cualquier estancia que se quiera, e incluso en exteriores. Los expertos lo recomiendan como suelo ideal para los baños y las cocinas, ya que suelen ser lugares con tendencia a ensuciarse o vivir con condiciones de humedad más elevadas que el resto de la casa.

De igual manera, las posibilidades aumentan también por sus diferentes acabados, pudiendo ser sobrio y mate para lugares que busquen la frialdad, la elegancia y lo exclusivo; pero también, pudiendo tener un acabado brillante, que brindará una iluminación superior a cualquier estancia.

Ahorro importante

El precio de este revestimiento para suelos siempre dependerá de la zona geográfica, de la empresa contratada y hasta de la calidad de los productos elegidos. En todo caso, mirando el nulo mantenimiento que requiere y la durabilidad del material, terminará siendo mucho más económico que otras tantas alternativas de revestimiento de suelos.

Pero sin duda, el mayor ahorro estará en el tiempo invertido. Este tipo de suelos puede instalarse con mayor rapidez que otros de similar acabado, de manera que los proyectos de construcción estarán acabados en una fracción del tiempo, algo que suele ser prioridad absoluta en el caso de las reformas de viviendas, donde los propietarios no se pueden permitir una dilación de tiempo tan amplia en los trabajos de adecuación de suelos y demás.

Como el primer día

Algo que diferencia al microcemento del cemento pulido -al que se asemeja cuando ambos tienen acabados brillantes- es que el microcemento no se agrieta, no se cuartea, no se desgasta, ni sufre problemas asociados con la humedad, a químicos abrasivos, o a fuertes golpes o rayones. Directamente, siempre estará como el primer día, requiriendo poco más que una limpieza esporádica.

Y es que la durabilidad del microcemento no es solo una cuestión técnica, producto de los materiales utilizados y la forma de fabricación, sino también de estética, ya que puede soportar desde tránsito pesado hasta elevadas temperaturas, pero también condiciones como la humedad excesiva, sin que sus condiciones estéticas o visuales se vean alteradas en lo más mínimo.

El suelo de una casa, más si se trata de las estancias más destacadas de la misma, siempre debe brillar con luz propia. El microcemento es un revestimiento que apunta directamente al cumplimiento de ello.